Peregrinación a Santa María – Brasil
Este 15 de Abril de 2018, se celebró en Santa María, Brasil, una triple conmemoración.
En primer lugar, los 70 años de Santuario Tabor, primer Santuario de Brasil, bendecido por el Padre José Kentenich el 11 de Abril de 1948. Por otro lado, los 70 años de la Carta de Santa María: simiente de la Obra de las Familias de Schoenstatt y donde el Padre nos invita a dar un lugar de honor a Nuestra Señora en los hogares, nuestro Santuario Hogar. Y se suma al festejo, los 70 años de la vid, plantada por el Padre Kentenich detrás del Santuario que aún hoy sigue dando frutos.
Un grupo de misioneros uruguayos, con algunos familiares, nos unimos en los festejos peregrinando a Santa María, tierra de origen de la Campaña de la Virgen Peregrina. Fueron unos días intensos y de gran alegría.
Ésta fue mi primera visita al Santuario Tabor. Siempre me genera gran expectativa la posibilidad de visitar a la Mater y de vivir por un rato la paz de su Santuario. Además de misionera, me sentí una representante de la Familia de Schoenstatt de Uruguay y del Santuario de Nueva Helvecia. A quien nos preguntaba de dónde éramos, les decía que veníamos del Primer Santuario Filial, algo así como el “hermano mayor” del Santuario Tabor, hijos del Santuario Original.
Pensar que el Padre Kentenich, luego de conocer la existencia de nuestro Santuario de Nueva Helvecia, se propusiera comenzar la Red de Santuarios en el mundo y en 1947, invitara a la comunidad de Santa María a erigir allí un Santuario, me hace sentir honrada por la audacia de las primeras Hermanas de María de Uruguay. ¡Cuánto tenemos para agradecer!
Durante nuestra estadía, la Hermana Rosequiel, nos acompañó en la visita a la Casa de Don Joao Luiz Pozzobon, compartiendo varias historias de su vida y su entrega. Conocimos un poco más los aportes que este gran hombre, Siervo de Dios, en proceso de canonización, le hizo a la Mater en su vida diaria: sus tiempos de oración, sus ideas y propósitos, así como su gran labor de misionar con la Virgen Peregrina, caminando más de 140.000 kms., iniciando la Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina.
Luego nos brindó una lindísima charla, en la Capilla del Centro Mariano, sobre la Alianza y la coronación de la MTA como nuestra Reina. ¡Qué claridad y motivación! ¡Cuánto amor a la Mater!
Más tarde, nuestra Madre Tres Veces Admirable de Schoenstatt, en el Santuario Tabor (“O maior do mundo” ya que se construyó con las medidas exteriores en el interior) nos recibió de brazos abiertos, rodeada de flores y nos regaló muchas gracias en estos días. Nos sentimos cobijados, fue transformando nuestros corazones y preparándonos como instrumentos suyos para el envío apostólico. ¡Muchos somos sus aliados, otros van a sellar la Alianza de Amor este año y en esta visita, el Padre Fabián Silveira selló su Alianza de Amor con la Mater! ¡Cuántas gracias!
El domingo 15, junto a muchísimos peregrinos, compartimos una hermosa celebración de la Eucaristía y peregrinamos hacia el Santuario Tabor cantando y rezando. ¡Fue una gran fiesta! Le regalaron 70 flores a la Mater en presencia de varios testigos de la Bendición del Santuario por el Padre Kentenich, 70 años antes. Las nuevas generaciones de niños y jóvenes acompañaron con banderas. ¡Y nosotros, presentes frente al Santuario con nuestra bandera de Uruguay!
Las gracias del Santuario nos transforman, nos hacen ver las cosas de otro modo, como instrumentos, como aliados, como hermanos… Hoy seguimos agradeciendo tantas bendiciones recibidas y queremos compartir con nuestra familia nuestro amor a la Mater! ¡Viva la Mater!
Soledad