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Cruzada a María

Cruzada a María

Lo que viví en la cruzada fue algo que me llegó muy fuerte al corazón.

Antes de ir, pensaba que era nada más y nada menos que caminar un poco con gente que me cae bien y me gusta estar, pero en ningún momento pensé que me iba a cansar y menos que iba a sentir a la Mater.

El primer día de la Cruzada, los primeros 10 km arranqué a sentir dolor en las rodillas y se me dio por pedir para rezar un rosario, sentía que eso me iba a dar fuerzas. Eso fue lo que pasó, seguí con el dolor en las rodillas y en los músculos durante toda la caminata pero en ningún momento se me dio por frenar, sentía que algo me estaba diciendo que siga y siga, que cuando llegue todo se iba a calmar.

1-C

En la noche del sábado, en el templo se pasó mal, ya que Tincho me dijo que no lleve colchón que lo haga por la Mater. Esta vez tuvo razón, ya que ofrecí la caminata y la peor noche de todas a la Mater. Creo que las fuerzas me las dio la Mater a través de cada persona que fui conociendo, ya que cada una me ayudaba y me decía algún comentario positivo que a mí me dejaba con ganas de seguir caminado.

El domingo llegando al Santuario me junté con mis hermanos de JM y a pesar de que yo no esté en su grupo, siento que ellos son mis hermanos y yo soy el suyo, todos juntos fuimos corriendo hacia el Santuario con fuerzas que nadie sabe de dónde sacamos, pero con muchas ganas de llegar, corrimos!

En la Alianza: lo que yo viví ahí estuvo muy salado, en primer lugar sentí una energía apenas entré al Santuario que la había sentido una vez sola y fue antes de mi confirmación en el retiro final.

Cuando vi que se sentaron los 8 hermanos adelante, sabiendo que su Alianza se acercaba y ver sus caras de nervios, yo sentí los mismos nervios que ellos. De a uno fueron haciendo su Alianza, cada uno de ellos con una carta que hacía que yo llore, y lloré no sé por qué, pero yo solo lloraba, fue una descarga que se juntó con una energía en el Santuario y no paré de llorar con ganas de estar ahí y sintiendo que mi Alianza con María era esta. Muchas gracias Schoenstatt por existir!

Tato Gattas

2-C

Creo que lo que viví este fin de semana fue algo increíble. Una entrega de amor por la Mater, una locura de amor totalmente.

Recorrer todo lo que recorrimos por Ella es algo que no se entiende y la gente no lo entiende. Es una locura mismo, y creo que hay que demostrarle con hechos a Ella lo mucho que la amamos, y esta es una de las tantas formas.

Estoy seguro que esta vivencia va a quedar marcada a fuego en mi corazón y estoy muy feliz de que haya podido caminar con la Mater.

Lucho Flangini

 

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